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Imagínate entrando en un enorme bazar, lleno de todas las cosas que puedas desear: ropa hermosa, joyas, coches, casas, viajes, un cuerpo sano y fuerte, una relación maravillosa, amigos increíbles, un negocio próspero....
En ese bazar mágico puedes pasar el tiempo que quieras, dar vueltas por sus pasillos, ver los estantes con lo más bello y deseable del mundo, puedes probar los perfumes más caros, saborear los manjares más exquisitos, subirte en los coches más selectos y sentir la libertad absoluta de saber que nadie te observa ni tratará de venderte nada.
Puedes jugar a comportarte "como si fuera mío".
Ahora, imagina un hombre joven caminando hacia ti. Trae una hoja de papel y un bolígrafo en una bandeja, y sonríe mientras se acerca hasta llegar justo a tu lado.
Sin decir palabra, te alarga la bandeja, y extiende su brazo, cubriendo con él toda la superficie del bazar.
¿Qué quieres?- te pregunta
¿Yo?- le contestas sorprendido
Sí, puedes elegir todo lo que desees. ¿Qué quieres?
Mira a tu alrededor… todo está repleto de objetos deseables, de sentimientos maravillosos, de "cosas" no materiales….Todo, absolutamente todo lo que cualquiera podría desear, está ahí, justo al alcance de tu mano.
De repente, una extraña sensación te invade. ¿Qué quiero?
¿Un coche nuevo último modelo? ¿Una casa con piscina y pista de tenis? ¿Un trabajo nuevo? ¿Una pareja con quien compartir la vida?....
Y entonces, te das cuenta de que, a pesar de haber soñado mil veces con tantas cosas, es probable que no sepas muy bien qué elegir.
Estamos acostumbrados a vivir en la limitación, en la escasez.
Nos hemos resignado a quedarnos sin nuestros sueños.
Y esa limitación nos impide saber qué es exactamente lo que queremos.
Haz la prueba. Si pudieras tener cualquier cosa, ¿Sabes lo que escogerías?
¡Probablemente tienes más claro lo que no quieres!
Hemos aprendido a vivir lejos de nuestros deseos más íntimos,
permitiendo que la televisión y las revistas nos digan cómo debemos vestir,
qué comer, cómo deben ser nuestras relaciones,
y cuál es la imagen que debemos proyectar para ser "felices".
Pero esto no se ajusta a la mayoría de lo que Realmente queremos.
Por eso, cuando pides Abundancia, Prosperidad, Riqueza, lo primero que te encontrarás será… A ti mismo.
¿Estás preparado para descubrir Tus Propios Deseos… y hacerlos realidad?
Para tener lo que quieres, primero debes saber
qué es exactamente lo que tu corazón sueña.
Y eso… es algo diferente para cada uno de nosotros.
Sí, requiere de tu implicación en el proceso. Pero es mucho más fácil de lo que crees.
Y puede dártelo todo.
Desde que empleo los métodos que enseño en "Vive tu Abundancia", descubrí que mi vida es mucho más fácil, más divertida y mucho, mucho más próspera que antes.
Sólo tengo que pedir lo que quiero, y se manifiesta en mi vida. Y puedo enseñarte a hacerlo exactamente igual. ¡No te imaginas lo que hay esperando para ti!
¿Qué quieres tú? Es tu turno….
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